Sobre las propinas...

Ayer fui a cenar a un restaurante en Barcelona. Eramos cinco. En el momento de pagar, hicimos cuentas y acabamos redondeando al alza para facilitar los cambios. La conclusión es que acabamos dejando tres euros de propina (Quinientas de las antiguas pesetas). En aquel momento nos miramos los cinco preguntándonos si no era demasiado. Por supuesto que era demasiado. Ya no por el valor de los 3 euros, sino por el hecho de que todos nos estábamos preguntando por dentro: ¿por qué tenemos que dejar propina a un servicio que no ha hecho nada especial más allá de ponernos los platos en la mesa? Yo estoy totalmente en contra de esas propinas. No sé tu caso, pero yo llevo varios años trabajando y nunca me han dado propinas por muy bien que haya hecho el trabajo; es mi trabajo hacerlo bien. Tampoco las he esperado ni las esperaré.
Entiendo y animo a dejar una propina a aquél camarero que es simpático, amable, que intenta que tu cena en ese restaurante sea algo más que comer y alimentarse, que convierta tu cena en un evento agradable. Pero ¿por qué dejar propina por defecto, simplemente "porque si"? Muchas veces, dejamos propina por inercia, independientemente del trato que hayamos recibido, siempre y cuando haya sido al menos correcto. Me parece mal y además no incita al trabajo bien hecho. Si los camareros supìeran que pueden ganar un sobresueldo a base de propinas por dar un valor añadido a su trabajo de servir en las mesas, el resultado sería mucho mejor. Puesto que estamos en la dinámica de dejar propina siempre, la calidad del servicio recibido cada vez es peor. Por ello, tan solo quiero llevarte a la reflexión e invitarte a que, de ahora en adelante, SOLO dejes propina cuando estés realmente contento con el servicio, y NUNCA cuando tan solo seas servido.

Primero Carrefour...ahora Yoigo...esto es la revolución!

Si hace poco contábamos la noticia de que Carrefour se unía al sector de la telefonía móvil de la mano de Orange, ahora es Yoigo, anterior Xfera, quien entra en el mercado. ¿Quién son? Muchos no os acordaréis, pero años atrás salieron a concurso las licencias para operador 3G, que fueron otorgadas a Telefónica, Vodafone, Amena y Xfera. Aquí conviene hacer un inciso...¿qué es 3G? Sin intentención de ofrecer esta explicación con el más mínimo tipo de rigor histórico, podemos resumir a grandes rasgos que la primera generación de teléfonos móviles (1G) operaba con tecnología analógica. Este era el sistema Moviline de Telefónica. Posteriormente llegó la segunda generación (2G), con terminales que operan con tecnología digital, mediante un sistema llamado GSM. Posteriormente, llegó la segunda generación y media (2.5G), que no es más que una modificación de GSM para poder navegar por internet desde el móvil. Esta generación usa el sistema GPRS que a muchos os sonará. Finalmente llegó la tercerga generación (3G), que para que se entienda fácilmente es al móvil lo que el ADSL al fijo, pero con la salvedad de que la 3G es inútil porque de momento a nadie se le ha ocurrido para qué demonios queremos tener ADSL en el móvil...todavía se busca lo que los entendidos convienen en llamar la "Killer application". Bueno, pues sigamos...
Yoigo viene a ser la marca comercial para telefonía móvil de estos últimos a los que se concedió la licencia 3G, Xfera, y se presentan como la primera compañía low-cost para telefonía móvil...vamos, lo que vueling vino a ser para el mercado aéreo. Yoigo ofrece un sistema tarifario que parece querer poner en ridículo al complejo entramado de tarifas con las que nos intentan engañar las grandes compañías. Parece que no hay trampa ni cartón. 12 céntimos el establecimiento, 12 céntimos la llamada a móviles o fijos, 10 céntimos los mensajes de texto (SMS) y 6 euros de consumo mínimo. Todo ello sin IVA, claro. Fin.
Todo esto viene a decir que ahora mismo tenemos en el mercado cuatro operadores: Movistar, Vodafone, Orange y ahora Yoigo, más los llamados operadores virtuales: Carrefour, próximamente Euskaltel y The Phone House. Yo no es que quiera animar a nadie a escoger un operador u otro, pero lo único que sé es que a mayor competencia, mejor para el usuario. Tendremos mejor calidad, mejores precios, y más oferta. La batalla entre operadores está servida.
Para más información, aquí teneis: www.yoigo.com

Fast Good - By NH Hoteles and Ferran Adrià

Buen juego de palabras para definir lo que es un "Fast-Good". Creado de la mano de NH Hoteles y Ferran Adrià, Fast Good es un restaurante para comer rápido, pero de una manera algo más sana que en los tradicionales Mc Donald's, Burger King, etc. ¿En qué consiste? Vayamos por partes:

- El local: decorado en plan moderno, no tiene nada que ver con la suciedad habitual de los fast-food a los que estamos acostumbrados. Intentan crear un ambiente moderno y elegante...y lo consiguen bastante bien. Tienes la sensación de estar en un buen restaurante, aunque realmente estés en un fast-food camuflado.

- La comida: como comento, al fin y al cabo es un fast-food, así que lo que encontramos son ensaladas, hamburguesas y bocadillos calientes. También se pueden acompañar de alitas de pollo, fajitas de carne o vegetales y cualquier tipo de bebida: refrescos, cerveza, zumos de frutas, etc. Ahora bien, todo es de mayor calidad de la que podemos encontrar en un fast-food típico. Las ensaladas, bien envasadas en plástico, las puedes encontrar con surtidos de diferentes lechugas, frutos secos, fresas, diferentes tipos de quesos, tomates confitados...vamos, unas señoras ensaladas de calidad...nada que ver con las ensaladas industriales que podemos encontrar en los clásicos fast-food (aunque últimamente se están poniendo las pilas...¿habéis probado la ensalada King de Mc Donalds's?)...pero eso sí, envasadas. En cuanto a las hamburguesas y bocadillos, la variedad no sería su principal virtud, pero parece suficiente. Yo probé la Hamburguesa Pepito, servida como un Pepito de Lomo, pero con una hamburguesa alargada en su interior. Bastante buena para ser una hamburguesa, y sobretodo, servida con pan que parecía natural y hecho con harina y productos naturales...no como el pan plastificado de las clásicas cadenas de hamburguesas.

- El sistema: Tu entras en el restaurante y coges un cestito metálico, como si a la compra te fueras. Primero pasas por una nevera de estas con el frontal abierto típicas de supermercado, donde tu mismo te sirves la ensalada y la bebida. A continuación vas al mostrador donde te cobran por lo que has cogido en la nevera, y te toman nota del bocadillo o hamburguesa que quieres (si no quieres nada más, pues nada más). Entonces, aquí está el truco. En lugar de correr para darte la hamburguesa en la mano y que se te enfríe mientras comes tu ensalada, te dan un número grande de plástico. Tu te vas a tu mesa y dejas el número allí. Cuando ven que estás acabando la ensalada, ellos te traen, servido en plato, lo que has pedido. Aquí ganan por goleada a los clásicos fast-food. Buen sistema.

- El precio: algo caro, pero razonable. Ensaladas a 5-6 euros, que considerando que están envasadas, creo que están algo por encima de su precio. Bocadillos calientes y hamburguesas entre 6-7 euros. Bastante caro. Bebidas a precio normal. Vamos, que por unos 13-15 euros comes. Para ser un restaurante de comida rápida, lo veo algo excesivo, pero razonable.

- El servicio: educación y corrección, pero no esperemos trato amable ni nada parecido.

- La recomendación: yo no sería un habitual del lugar, pero creo que para comer rápido, es una buena alternativa, un poco cara, pero razonable. Os recomiendo a todos que lo probéis y decidáis por vosotros mismos. Estoy seguro que os gustará el concepto.

- ¿Y esto dónde está? Pues aquí vienen las “bad news”…de momento solo se puede encontrar en Madrid y en Santiago de Chile (¿?). Pero, las “good news” es que próximamente abrirán locales en Barcelona (Balmes con Roselló), Las Palmas de Gran Canaria y Valencia. Así que tan pronto como inauguren ese Fast-Good de Barcelona, habrá que ir pensando en hacer una visita.

Si quieres saber más sobre este sitio, aquí os dejo su página web, que está bastante bien por cierto: http://www.fast-good.com

Una verdad incómoda

Hará cosa de 2 meses me enteré de la existencia de una película que estaba provocando mucha polémica al otro lado del oceáno. Previo paso por e-mule (videoclub habitual) pude comprobar el porqué de tanto revuelo.

El título, "An inconvenient truth" (Una verdad incómoda) ciertamente refleja la sensación final del espectador. Es realmente incómodo como se plantea el problema del calentamiento global. No por lo alarmante del asunto (que también) sino por la claridad y el rigor con el que se aborda.

Todo el mundo, quien más quien menos, ha escuchado hablar del calentamiento global pero no sé si os habéis parado a pensar en la gravedad y, sobretodo, en la inminencia del problema.
Hasta esta película, yo personalmente, había asociado lo del calentamiento global a una de esas paranoias mediáticas que sólo sirven para llenar periódicos y telediarios. (Podemos encontrar muchos ejemplos: la vacas locas -> ¿es que no sigue habiendo hoy en día vacas locas?; la gripe aviar -> ¿es que no sigue habiendo hoy en día gripe aviar?; ...) "Una verdad incómoda" presenta el problema de manera que no hay escapatoria defensiva posible. Me explico: cuando obtienes información procedente de una fuente poco fiable o parcial, siempre nos queda la alternativa defensiva de descalificar a la fuente... y listos. Si un grupo de "ecologistas" te habla del calentamiento global... siempre te quedan las siguientes excusas "¿con qué datos afirman lo que afirman?", "¿qué estudios refuerzan sus teorías?"y la mejor "por cada estudio que demuestre eso, existen n que demuestran lo contrario". Si la información viene de la televisión... "es una paranoia mediática".

Con esta película, no hay escapatoria posible: de ahí lo incómodo de la cuestión.

"You can run, but you can't hide"

Narrada a modo de documental biográfico, explica el cambio de mentalidad de Al Gore (ex-vicepresidente de los EEUU y candidato a la presidencia por el partido demócrata en las últimas elecciones) desde que perdió las últimas elecciones en circunstacias sospechosas hasta la actualidad. Actualmente, Al Gore ha hecho del ecologismo su cruzada y se pasea por los EEUU captando adeptos para su causa (que es la causa de todos).

Tras ver la película entiendes que algo hay que hacer: que si nos quedamos de brazos cruzados sólo aceleraremos el proceso de calentamiento.

Espero haberos creado las ganas de ver la película. Con eso ya sería feliz... por un rato.

"Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no escucha". Victor Hugo. Novelista francés.